Blogia
AL ESTE DEL CANAL, blog de ANA ALCOLEA

AGENDAS


Vuelve a caer la niebla sobre Zaragoza cuando bajo al centro a comprarme una agenda. Todavía nadie me ha regalado una este año, la que tengo de escritorio no la puedo llevar en el bolso porque ya me empieza a doler la espalda. El gimnasio lo tengo olvidado y se nota. Me hacía urgente falta así que me he adelantado.

Siempre me he preguntado por qué algunas agendas llevan una regla, generalmente transparente, incorporada. No sé, creo que a mí no me hace ninguna falta en mi vida cotidiana. Cualquier otra cosa sería más útil para el uso diario: una goma de borrar, un bloque de hojitas adhesivas amarillas, un salvaeslip, una toallita desmaquillante, qué se yo; pero una regla... Esta mía de hoy tiene quince centímetros. Tal vez la pongan para comprobar las dimensiones crecidas o decrecidas de eso en lo que estáis pensando. De hecho, esta agenda que he comprado me ha parecido diseñada pensando en los congéneres de sexo masculino. No sé por qué, pero he tenido esa asociación de ideas. Y desde luego que la regla no la han puesto para medir el tamaño de los Montes Urales en el mapa que también incorpora en una de sus últimas páginas. Eso sí, las tapas tienen un tacto estupendo: son todo suavidad.

En fin, corramos un tupido velo.

Aunque sea de niebla.

1 comentario

Javier -

Para eso en lo que pensamos no debe ser, en tal caso iría graduada en micras. Agendas..., ya te contaré algo sobre agendas. Ahora que no fumo me regalan tabaco. ¡Lástima! J. :*