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AL ESTE DEL CANAL, blog de ANA ALCOLEA

BURLA

Que existan en la televisión pública un programa como "Mira quién baila", con un cásting imagino que carísimo, a tenor del caché habitual de algunos de los participantes, es una burla al contribuyente.

Y más aún en época de crisis, en la que hay que apretarse el cinturón, y la gente entra en depresión o cosas aún peores por no poder pagar la hipoteca o la ropa de sus hijos.

Y otra vuelta de tuerca: la gente lo ve. Fue lo más visto a su hora por los televidentes.

No entiendo nada.

A los burladores siempre les ha gustado y satisfecho burlar.

Pero que a los burlados les guste ser burlados. . .

Es el colmo. ¡Que les pagamos la ropa, las clases de baile y mucho más con nuestros impuestos!

3 comentarios

Néstor Mas -

Si no recuerdo mal, a raíz de la polémica que surgió cuando la nieta de "el abuelo" fue una de las participantes famosas en el citado programa, (cuestionándo muy mucho que fuese pagada con dinero público): el caché que percibía cada uno, o al menos ésta en concreto, de los participantes rondaba los cincuenta mil euros. Ahí es nada. Claro que, por otro lado, no hay dinero en el mundo que pueda pagar semejantes cotas de estupidez y ridículo. Por mucho que se intente enmascarar de programa solidario, blanco, familiar, bla, bla, bla... No ha lugar en una tele pública. Toca las narices del contribuyente tener que pagar a la super-mega-poli facética Y fantástica y "siliconada" Anita.

Rafael Lucena -

Aunque sea zafio, hortera, ridículo, patético, vergonzante, triste... (mucho más, y mira que es difícil, que un concierto de Madonna), el programa, si fue líder de audiencia, es un éxito económico (publicidad directa e indirecta) y hay que darle la enhorabuena a quienes lo llevan a cabo. Los que no entren en ese espectro, como tú y él y yo, hala, a leer Jasón y los argonautas después de darle al interruptorcito.

Dani -

Yo tampoco entiendo nada. Si esto lo hiciese una tele privada me daría igual. ¡Pero es la nuestra! ¡La que pagamos entre todos! Si antes de plantear estos programas nos pidiesen rascarnos el bolsillo para pagar a todos esos elementos, la cosa sería bien distinta. Pero así, saliendo del fondo común, toda esa pasta no le duele a nadie.