SELECTIVIDAD

Esta que aquí veis es la oración, frase, suma de proposiciones, o como le queráis llamar, enunciar, calificar, con la que han tenido que enfrentarse, lidiar, sufrir la mayoría de los alumnos de la Comunidad de Aragón:

 

"ARRANCA CON LA MODERACIÓN DEL QUE SE SABE INCAPAZ DE DICTAR LEY, PERO NADA LE IMPIDE TERMINAR QUERIENDO IMPONER EL LARGO DE LA FALDA DE LA TEMPORADA"

Me faltan palabras para expresar lo que pienso, opino, siento.

Sólo una.

O más.

Pero no la,las voy a escribir aquí.

¿Alguien se atreve con el análisis?

Por cierto, que eso, o sea su análisis y comentario, se supone que muestra la madurez cognitiva e intelectual de los alumnos.

Así no llegaremos a ninguna parte.

3 comentarios

[José María - 16 de junio de 2006 - 13:45]

Estoy totalmente de acuerdo contigo, Ana. La oración propuesta es algo incomprensible. ¿Se le cruzarían los cables a la armonizadora? Espero recapaciten y reflexionen. Y que no vuelva a ocurrir.

[Nerea - 15 de junio de 2006 - 00:25]

¡Hola, Ana!
Prometo que no lo he leido (bueno, debería leerlo varias veces para pillar todo), pero esta tarde me había copiado la frase en el cuaderno para intentarla. Ya te mandaré por mail lo que me salga, ¿vale?
Y el día 20 espero verte por el teatro, a ver a nuestra futura famosa actriz en potencia, Alba.
Y tambien espero una crítica que destroce mi relato sobre Mozart.
Besos guapísima!

[ana a. - 14 de junio de 2006 - 17:23]

Ahí va una parte de la solución: "Eso" de ahí arriba es una oración compleja por coordinación adversativa con dos periodos o proposiciones. La primera tiene un complemento circunstancial o de régimen, tanto daría en este caso, que contiene una proposición subordinada adjetiva sustantivada de la que depende, a su vez, otra proposición, esta vez subordinada sustantiva introducida por un verbo en infinitivo, con valor de complemento de un adjetivo. El segundo periodo, o proposición coordinada tiene un verbo del que nace otro verbo que introduce una proposición subordinada sustantiva con función de complemento directo, de la que arranca una proposición subordinada adverbial propia modal introducida por un gerundio, que contiene una proposición subordinada sustantiva introducida por un infinitivo, que tiene función de complemento directo.
No sé si me he perdido entre tanta proposición deshonesta. Y todo para hablar del largo de las faldas.
Tiene narices la cosa. O bemoles. O lo que queráis.
Muy deshonestas proposiciones.
La verdad.