TEATRO

Máscara veneciana.
Dorada y con piedras brillantes.
Como las que nos ponemos todos los días.
Doble sesión de teatro en el día de ayer.
Matinal en el Principal con los alumnos. Vimos una interesante producción del TARTUFO de Molière: una compañía teatral que está interpretando la obra. Se mezclan los diálogos del comediógrafo francés con los de los actores. La ficiticia realidad se cohesiona con la ficción literaria y el conjunto resulta agradable en sí mismo. Y divertido. El espectador purista de lo clásico tan vez no disfrute de un TARTUFO recto, pero es que, no olvidemos, se está hablando de la impostura, de la mentira, de la falsedad. De teatro, al fin y al cabo.
Y por la tarde, una serie de monólogos, EN VOZ BAJA del "Grupo 13": niños y adolescentes espléndidamente dirigidos por Concha Guiu. Voces trabajadas, dicción clara, voz impostada: lo que no tienen muchos de los "actores" que se suben a los escenarios profesionales lo tienen estos muchachos de doce o quince años. Y además, se comen el escenario a bocados. Y llegan al público con un gesto de ojos, o de dedos, que es un "batir de alas". No escribiré aquí toda la lista, pero Eliana Jordán dice el verso clásico mejor que algunas "actrices" que pisan escenarios prestigiosos, Altonio Susán parece que siempre haya estado entre bambalinas. Miguel Casanova tiene un salero, una dicción y una expresión escénica de "club de la comedia" para arriba. Y Alba García, por la que yo asistí, se mueve, habla, mira, y cuenta, como si toda la vida hubiera estado al otro lado del telón.
Gracias, Nerea, por este regalo de teatro, o sea, de vida.
Unos artistas adolescentes.
4 comentarios
alba -
Magda -
Que lindos momentos pasaste, que bueno.
Un buen fin de semana.
Ricardo -
Nerea -
¿Regalo? ¿Gracias? De nada, entonces. Ojala te pueda hacer muchos mas si te gustan tanto, Ana.
Espero que esta vez no pase tanto tiempo en vernos como la ultima vez que fuimos al teatro.
Muchos besos!