LIMBOS

Las autoridades eclesiásticas amenazan con quitarnos el LIMBO, que era uno de los pocos reductos armónicos, serenos, inocentes, que nos quedaban, lejos del fuego diábolico eterno infernal, y de ese aburrido cielo lleno de santurrones y beatas.

¿Dónde iremos ahora cuando estemos en ese estado de semiconsciencia, de semiserenidad de semiloquesea?

¿De dónde vendremos cuando aterricemos en la realidad?

Hay que reivindicar el limbo.

¡Viva el limbo!

 

NOTA: Esta tarde a las 7, en la FNAC de Zaragoza, Félix Teira presenta su nuevo libro.

2 comentarios

[Nicolás - 29 de noviembre de 2005 - 18:08]

Mis estancias más fructíferas en el limbo tuvieron lugar cuando era estudiante. Creo que algunas de las cosas más importantes que he pensado las encontré en el limbo, mirando por la ventana mientras el profesor hablaba.
¿Tú también tienes alumnos así?

[Javier - 29 de noviembre de 2005 - 14:25]

¡Viva! Conozco a más de uno que vive de forma permanente en ÉL. J. ;)