Blogia
AL ESTE DEL CANAL, blog de ANA ALCOLEA

Instintos

Ayer y otros días he estado recolectando frutas del bosque para hacer mermeladas o cosas varias comestibles. Pensaba que ese afán de salir al bosque y recoger lo que el bosque nos da, no es sino un recuerdo genético de la época en que los humanos salíamos a cazar, a depredar, a coger los frutos de la naturaleza.

Así que estos días he sido una depredadora de mirtilos y de otras bayas que aquí llaman "multe": son amarillas, suaves al tacto y crecen a ras del suelo en las montannas en zonas frías, donde la nieve ha estado largo tiempo.
Se comen con azúcar porque son un poco ácidas aunque deliciosas, o envueltas en nata. Yo las prefiero solo con azúcar: una talla más y entraré en profunda depresión.

Hoy no he recolectado frutas, solo he paseado por el hospital. Y pienso en otro instinto que también tenemos grabado en los genes, el de supervivencia. Cómo algunos cuerpos pueden seguir viviendo a pesar de todos los annos vividos. A pesar de tener todos los colores en la piel como cunnos de haber pasado todas las fronteras de la vida. A pesar de que los ojos pueden ser más y más transparentes cada hora que pasa.

Instintos: a veces recolectamos para sobrevivir, a veces por placer. A veces solo sobrevivimos.

Que no es poco.

2 comentarios

ana a. -

Las moras siguen siendo las favoritas. El problema es ese, que arannan, pero con azúcar son las mejores.

Javier -

Abundan las zarzamoras en la Ínsula. He recuperado también el placer de saborearlas -y de hacerme rasguñazos- como cuando era niño. Saludos